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Público. Como cientos, y cientos, y cientos, y cientos de personas hacen cada día, con el convencimiento de que hay algo que está por encima de otras cosas. Y que educar en la convivencia, como acabamos de decir, es más necesario que se sepan un número romano. Dirá la gente: se lo tienen que saber también. De acuerdo, pero hay prioridades en la vida. Has dicho, si no me equivoco, tres o cuatro “peros”. En nuestra vida encontramos muchos “sí, pero…”. Muchos, muchísimos. Imagínate, solo porque en tu clase vayan a gusto los chavales aprendan, ¿eh?, pero que vayan a gusto, habrá alguno que diga: “sí, pero, ¿qué pasará el año que viene cuando no estén contigo?”. Si en una escuela, en infantil, están haciendo algo con lo que los chicos están bien y aprenden. “Sí, pero cuando pasen a Primaria…”. Y luego encontrarás otros que digan: “Sí, pero cuando pasen a Secundaria”. “Sí, pero cuando vayan a la universidad”, “Sí, pero cuando vayan a la sociedad”. Esos “sí, pero”, solo son los miedos de las personas que se olvidaron de pensar como niños. O que hubo un momento en el que perdieron la ilusión por esto. O que, a lo mejor, olvidaron realmente hacia dónde tenemos que educar. A mí me ha pasado, a muchos de los que estamos aquí nos ha pasado, decir: “Tienen que rellenar una prueba, no sé qué…”. Sí, depende, también, de cómo recorres ese camino. No solo decir: “Apréndete todo esto, luego…”. No, vuelvo a decir, que en muchas escuelas en España, muchos institutos, se está haciendo partiendo de que los chicos y chicas pueden investigar, pueden contrastar información, pueden dialogar, pueden argumentar. Y de eso, después va a venir un examen igual, y el examen lo pasarán porque esa información la habrán retenido. Y, también, yo pienso en mucha gente de secundaria que tenemos aquí a algunos de Secundaria dicen: “Es que esto se puede hacer en Primaria, en Secundaria”… Hay centros en España, muchos, de Secundaria, que están haciendo muchas cosas interesantes y que tienen las puertas abiertas para ser visitados. Entonces ya no es un: “Ojalá esto fuera así”. No, no, se está haciendo ya. Como se está haciendo esos “sí, pero” tienen solución: basta con hablar con gente que ya lo está haciendo, y hay muchos.